martes, 16 de marzo de 2021

LA SEÑORA TAMAE WATANABE

 



 

 

     Tamae Watanabe es una mujer japonesa de 73 años de edad. Nace en Yamanashi, una localidad montañosa cerca del monte Fuji. Ella es noticia en un periódico gratuito, La Gran Época, que se reparte en la ciudad, por haber alcanzado los 8.848m de altura del Monte Everest siendo la persona de mayor edad en lograr esta hazaña. Según, Assian Trekking, empresa que organizó su escalada, para ella es la sexta cumbre de más de 8.000m de altura. Fue acompañada por un oficial de turismo de Nepal, ya jubilado y once sherpas.

      Me imagino a la señora Watanabe mirando desde niña los montes de su localidad. Viviendo su secreto deseo de escalar siendo adolescente. Quizá la montaña la llamaba por su nombre. El silencio dominante sería el precursor del primer paso hacia la cima, donde el viento helado le traería recuerdos de sus primeros y fallidos intentos.  El camino hacia la cima no carece de dificultades. Al llegar a la cumbre quizá solo viese nubes que bloqueaban la visión panorámica del lugar.. O quizá,  quien sabe, lo que vio la empujó a repetir varias veces el mismo reto con otra meta. O quizá en cada subida se transformaba en una versión diferente de sí misma o era la misma persona puliendo sus energías.

Pocas cosas sabemos de la señora Watanabe. El diario sólo destaca la parte deportista. Poco habla de sus ayudantes que no carecen de un gran valor y responsabilidad. Un grupo unido con un solo fin.                   

El código sería " confianza" .

      

      Dadas las dificultades que entrañan este tipo de escalada, la señora Watanabe es, por derecho propio, un ejemplo de coraje, perseverancia, y disciplina

      Personalmente pienso que la vida en sí puede ser un Everest lleno de dificultades, retrasos y progresos. En la escalada hay tropiezos, agua fresca, heridas producidas por grandes resbalones que hacen que nos cueste continuar. Heridas que siguen con nosotros y que nos acompañarán siempre. Cuando supuran el dolor del pasado nos impide el avance. La cima del Everest es la meta de los que se atreven a desprenderse del pasado, a ser consciente de cada paso que se da. Si el paso es equivocado, aunque duela hay que rectificar. El Everest es uno mismo o una misma.

    En definitiva, la hazaña de la señora Watanabe nos muestra como hay que ser valiente y despojarse de aquellas cosas que llevamos en la mochila que nos hacen más difícil la escalada. Habrá ocasiones en que nadie entienda por qué escogiste una cima difícil  en vez de otra más hermosa. Cada uno, cada una, en su empinada senda, sabe por qué, y no le importa no ser comprendida o entendido.

Cada uno de nosotros, mientras vayamos escalando grandes laderas, sería deseable y beneficioso que no perdiéramos la perspectiva.

Para ejemplo, la señora Tamae Watanabe.


                                                                                          IOLANTHUS







 

sábado, 27 de febrero de 2021

LA TORTUGA

 Se repite una imagen en el fondo de la psique:

Una tortuga nada en un balde de zinc.

Asoma la cabeza sobre el agua, respira, siente el sol en la piel. Agita sus pequeñas patas y sus uñas arañan el balde. Cree que ya casi está a salvo, que va a salir, que encontrará fuera algo de reposo, algo de luz.

Pero después de agitar las patas un buen rato, cae en la cuenta de que sus uñas no agarran el borde, una y otra vez resbalan. Por más que lo intenta nunca llega a salir del balde.

Cansada, la tortuga, se deja caer al agua. Hunde su cabeza, su caparazón, sus entrañas.

Estar sumergida no es desagradable, pero no se conforma. Dentro del agua se amortigua el sonido, no hay armonía, sólo el frio devenir de los días.

Con el tiempo, la tortuga, vuelve a reunir fuerzas. Asoma la cabeza fuera del agua. Instintivamente busca la luz porque no recuerda que está en un balde. Su naturaleza  buscadora se impone, la empuja. Y una vez más vuelve a intentarlo.

                                IOLANTHUS





domingo, 7 de febrero de 2021

If ye love me - Tallis - Tenebrae conducted by Nigel Short


13. Bien es cierto que el Salvador la conoce perfectamente

14. Por eso la amó más que a nosotros.

                                                                              EVANGELIO DE MARÍA MAGDALENA, FOLIO 18

                                                                                                                APÓCRIFO GNÓSTICO ED. OBELISCO, 

                                                                                                                                             JULI  PERADEJORDI.

 

 

MARÍA MAGDALENA

 

Todo el pueblo hablaba de él, en el lavadero, en el mercado. Los pequeños grupos de escribas se juntaban para hablar de la ley, hacían gestos de rasgarse las vestiduras. Ella llevaba varios días observándole, de espaldas y a distancia. Atraía a la multitud de toda condición y también a ella, sin saber muy bien por qué  abrigaba interés hacia el hombre que decía cosas poco oídas.

 Cuando nadie solicitaba sus servicios se veía en la necesidad de escucharle. Un cliente de los que solían visitarla le  habló de él. “¿Has visto a ese farsante que congrega a esos tontos?”. “¿Qué farsante?” contestó ella. La pregunta se quedaba sin responder. A una mujer no merecía la pena darle conversación. ¿Qué iba a saber una mujer de lo que se discutía en el Templo?

 Muy serio, el hombre se ciñó el manto. Con las manos sucias le dio una moneda y salió de la casucha diciendo que quizá volvería. Ella, mientras se vestía, pensó que la próxima vez le obligaría a lavarse si quería tocarla, aunque bien sabía que no le haría ni caso. Apoyada en el quicio de la puerta vio como una multitud se agolpaba calle arriba.  Se dio cuenta de que eran muchos los que le nombraban. No parecía otro de tantos rabinos y al final la curiosidad  pudo con ella. Así que salió a ver quién era el hombre que tenía la capacidad de reunir a la multitud y de estar en boca de todo el pueblo. 

Con el pasar de los días, cuanto más le escuchaba, más  necesitaba estar en su presencia. Guardaba las monedas que podía, las suficientes para subsistir un par de días sin trabajar. Después salía buscarle como si con ello contemplara lo más hermoso del mundo.

La tarde que por fin entendió lo que decía el Rabí  se le llenó el corazón de lágrimas. Esa noche y al día siguiente ya no pudo atender a ningún hombre. Supo por los  mercaderes que iban hacia Damasco  que sus amigos y el estaban invitados en casa de Simón  el fariseo  y sin pensarlo, con el poco dinero que tenía compró un tarro de nardo y fue en su busca.

Vio que el Rabí entraba en  casa del fariseo rodeado de sus amigos. Sintió vergüenza de perseguirle  pero terminó colándose por la puerta del corral. buscando la sala  se fue hacia él.  Cuando la vieron llegar empezaron a murmurar y a escandalizarse. Unos decían cómo era posible que se acercará tanto al invitado y empezara a llorar. Otros que no sabían su nombre, la llamaban  pecadora, otros la vieron caer de rodillas a los pies del invitado, otros porfiaban en que era hermana de María y Lázaro.

Mientras  abominaban de su presencia a causa de cómo se ganaba la vida, el Rabí cogió su mentón, la miró a los ojos y  le habló al corazón sin abrir la boca “Yo te conozco, no te juzgo”. Alzó la voz  a los que allí estaban para increparles que mientras ellos protestaban por el origen de la mujer o por el valor del perfume, ninguno  había lavado sus pies y en cambio ella lo estaba haciendo con sus lágrimas. Callaron de tal forma que sólo se escuchaba el gorjeo de las palomas. Mientras, ella le secaba la piel con sus cabellos y se  los untaba de perfume de nardo.   En su corazón percibía un atisbo de lo que iba a sucederle. Desde entonces le siguió a pesar de los reproches de sus discípulos.

Ella que creía que los hombres la amaban. Sin embargo aquel día, comprendió que lo que hacían con su cuerpo nada tenía que ver con lo que el Rabí le dijo  con la mirada. De ser una mujer indigna se transfiguró  en un alma dichosa porque  amaba y se sentía amada. Ya no tuvo necesidad de vender su cuerpo, ya nunca le faltó el pan, el la  proveyó de todo lo que necesitaba.

Después conoció a las otras Marías, que como ella siguieron al grupo pues le consideraban digno de la más ferviente atención.

IOLANTHUS


viernes, 22 de enero de 2021

MNEMOSINE

 


When I am laid, am laid in earth. May my wrongs create
No trouble, no trouble in thy breast;
Remember me, remember me, but ah! forget my fate.
Remember me, but ah! forget my fate.

    
               Dido y Eneas, ópera de Henry Purcell 
                       Texto de Nahum Tate ( 1652-1715)
                  


No siempre  que dos fósforos se prenden al mismo tiempo
acaban fundiendo sus ceras en íntima clandestinidad.
Pero siempre queda el impulso de querer la fundición
como una cuenta pendiente que no se sabe si se saldará.

Aparece Mnemosine y recuerda...
Que no fue falso el instinto que llevó a Dido a llenar  a Eneas de verbos concupiscentes
pues su sola imagen, sus ojos,  suficientes para que Dido
sintiera el impulso de la vida en ella y la misma vida la prendiese.

De Eneas apenas sabemos...
Es posible que ya no le quede mecha que consumir
y Mnemosine no acierte a despertar su interés.
O, simplemente, no desea enredar en los rescoldos del troyano
para que se apaguen definitivamente.

Se consumieron las mechas
se derritieron las ceras
Y el invierno nevó sobre sus restos.

Mnemosine como ha venido, se va
sin que quede nada de esta leyenda fenecida.

IOLANTHUS 














domingo, 3 de enero de 2021

LA MÁQUINA DEL TIEMPO


 

     Cómo explicar lo que no se ve? ¿Qué lenguaje puede hacer visible lo invisible? ¿Cómo describiros un artefacto que mi vista jamás pudo contemplar?

 

     El nuestro no era un laboratorio como los demás, al menos al principio. Quiero decir con esto que carecía de ordenadores, probetas, microscopios etc. El nuestro era un laboratorio mental. Lo cierto es que Andrés no confiaba en nadie ni en nada y menos en aquello que pudiera ser susceptible de ser hackeado, infectado o copiado etc. Ni discos duros ni pen drives ni ningún tipo de soporte digital. Increíble ¿verdad? Sí, pero sus razones tenía, además de una memoria prodigiosa. Andrés tenía y tiene enemigos y uno al que podría llamársele Doctor  Zito. Yo era o lo sigo siendo, no sé una especie de secretaria que ponía en orden sus pensamientos, sus cuadernos que eran muchos, sus diseños, sus dibujos, dudas, fórmulas y angelitos mofletudos. Él hablaba en voz alta conmigo y así al escucharse a sí mismo, le ayudaba a resolver sus dudas. Andrés escribía a mano. A veces entraba en una especie de trance escribiendo páginas y páginas hasta caer rendido. Me conoció en la Universidad cuando cursaba el último año de física cuántica. El daba clases de matemáticas a los de primero. Un día perdí mis apuntes de física que por suerte llevaban mi nombre y él se dedicó a buscarme por toda la universidad hasta que dio conmigo.

   -Srta. Olenska? ¿Marta Olenska? 

   -Sí-dije yo.

 Y me devolvió los apuntes que busqué por todas partes durante días.

 Emocionada le pregunté dónde los había encontrado y me contestó que en la biblioteca.

    Después de aquel encuentro se tomó muy en serio mis trabajos. Salimos juntos y después de intercambiar varias ideas sobre el tiempo y el espacio decidimos colaborar en su proyecto.

    Del laboratorio amanuense, pasamos al físico. Recibió una beca y se volcó en la invención de la máquina del tiempo. Lo tenía todo en la cabeza. Y fue depositando poco a poco y de manera física todos sus conocimientos en el prototipo. Nos encerramos en una nave industrial en Valladolid. Nadie sabía nuestra ubicación, ni siquiera el D. Zito que ya empezaba a darnos muestras de acoso. Él, es dueño de una gigante tecnológica, imaginaos si llegara a sus manos el proyecto de Andrés y mío.

    En la nave, discreta y oscura trabajábamos hasta tarde. Andrés no me dejaba ver lo que hacía. Aseguraba que era por mi seguridad, pero aquello me dolía pues yo también estaba aportado ideas al invento. Día a día, como un dictador, me ordenaba y yo por tal de contribuir al gran proyecto cedía terreno.

   -Ya verás, Marta, iré directo a los acontecimientos más importantes de la humanidad. Encontraré la verdad. Obtendré respuestas del futuro y conduciré al planeta al mayor bienestar que jamás haya conocido.

    -Es muy gratificante todo lo que dices, pero ¿no crees que estás jugando a ser Dios?

No me contestó y le dije que me gustaría ir con él. Me dijo que no podía ser pues sólo había un asiento en el prototipo.

   De alguna manera asumí que no haría el viaje. En nombre del bien común y la humanidad no estorbaría el invento. Mientras, pasaban los días y apenas dormía, se alimentaba de porquerías y refrescos de cola y como un poseso garabateaba en el papel cosas que yo ya no entendía. Me perdí y él se negó a explicarme de qué trataba sus nuevos descubrimientos.

   Yo veía la máquina desde lejos como si fuera una sombra chinesca. Apenas distinguía una forma voluminosa mas no podía acercarme. Le dije que me avisara cuando estuviera listo para partir y él me prometió que lo haría, pero no lo hizo.

   Fue una madrugada. Mi camastro estaba al lado del suyo. Me quedé dormida como siempre oyéndole trastear. El clic clac, el sonido de una turbina sorda, el rasgado de un papel…

   Un sonido brusco y seco con una luz intensa me hizo despertar. Abrí los ojos. Era de madrugada, el reloj marcaba las 4h y 05’ Tan sólo había transcurrido diez minutos desde que cerré los ojos. Entonces le vi delante de mí. La cara gris y desencajada. El traje ignífugo estaba hecho jirones. Me miró con los ojos tristes cual si viniera de un funeral. Se dirigió a su camastro dando unos pasos cortos, urgentes quizá desesperados y se dejó caer en la cama. Supe que algo grave había pasado. Le dejé dormir. Intuí que había puesto la máquina en marcha y cuando decidí ver si era cierto  descubrí que mis sospechas estaban justificadas.

  Diré que allí había una silla giratoria, restos de hollín en el suelo, papeles quemados por todo el suelo, olor como si hubiera habido allí una fundición de metales.

Estaba rabiosa y me sentía  impotente. No lloré, ese mamón no lo merecía. Me había utilizado y después con la promesa de mejorar el mundo me dejé llevar por un puto loco. Fui a su camastro llena de furia, con la intención de sacarle del sitio a patadas. Entraba la luz del día por la ventana y pude ver su rostro con claridad. Me paré en seco y mi pierna se quedó al borde del colchón. Le faltaba la nariz, los dedos de ambas manos y los de los pies. La piel estaba lisa como si nunca hubiera tenido esos apéndices.

Me asusté y salí corriendo  de allí.

Ahora estoy escondida. Me buscan, lo sé. Quieren respuestas, sobre todo el D. Zito. Yo también necesito respuestas.

 

IOLANTHUS

 

 

jueves, 24 de diciembre de 2020

NOCHENADABUENA

 Si pudiera...comienzan sus poemas algunos poetas.


Si pudiera cambiar en un pequeño ápice una noche que de buena no tiene nada.

Si pudiera encontrar el camino de regreso hacia la ilusión.

Si pudiera,  pero no puedo. 


Ya es noche de niños.


Hemos dejado los dulces por que engordan.

No comemos carnes por el  colesterol ni mariscos por el ácido úrico.

Sin sal por la hipertensión, sin azúcar por la hiperglucemia.

Sin mi hija por la puta Covid, sin mi yerno por la cuarentena.

Sin  cobrar el ERTE y dándonos por el Orto.

Sin esto, sin lo otro y lo de más allá.


Y yo me pregunto, me pregunto tantas cosas...

Si prefiero la Monarquía o la República aseguro que no.

(Sinceramente me importa una mierda)


Nochebuena sólo para niños y a sonreír.

Navidad para los inocentes que nada saben de tanta calamidad.

Por una risa de bebé o una conversación entre pequeñas criaturas,

Por esas personitas sonrío.

Por el amor a quien dejé en el camino y por los que están aún conmigo.

El amor,

 y sólo el amor, acaso lo único verdadero cuando es sincero y no fingido.


IOLANTHUS





 



viernes, 27 de noviembre de 2020

¿INSTAGRAM?

 

DIBUJO HECHO CON PAINT POR IOLANTHUS
TÍTULO: OTOÑO




Te sigo si me sigues. Si me sigues, te sigo. ¿Discriminamos o sólo damos a “seguir” por compromiso, porque aumentan el número de seguidores, porque de verdad su galería nos gusta, porque aumentan posibilidades de ser más visible etc? Fotos y más fotos ¿Cuánto tiempo le dedicamos a mirar esas maravillas de paisajes, composiciones, abstracciones, pensamientos, textos que van debajo de la foto? Pensémoslo.

Publicidad a tutti plein o tutiplén, según se quiera. Todo por nuestro bien. Los chats sirven para que desconocidos y desconocidas busquen pareja. Para los que ya tenemos pareja, esto es un engorro.

Me hice Instagramer para promocionar mi blog, mi libro y mi nombre como escritora y poeta. Me decían que si no estás en las redes sociales no eres nadie.  Más bien creo que las gigantes tecnológicas no son nadie, no tienen negocio de datos sin los usuarios/as. No alcancé mis propósitos.* Sigo siendo nadie y por mí estupendo. 

Bien, mi experiencia en esta red social no me ha servido de nada. Más bien para hacerme perder el tiempo a parte de querer saber todo sobre mi para, Dios sabe que espurios negocios.

¿Paranoia? ¡Quién sabe!

Borré todas las fotos y los textos. Me dio muchísima pena. Mientras borraba cada foto con cada poema, con cada minitexto, con sus pequeños comentarios de seguidores…Vi pasar delante de mis ojos casi dos años de mi vida en imágenes. Cuando éramos libres y cuando nos hicimos esclavos de las decisiones de los que nos gobiernan con la excusa de la pandemia. O ya éramos esclavos y el virus nos puso la puntilla. Vi toda la información que estaba dando sobre mi persona de forma gratuita a cambio de generarme dependencia del número de seguidores que subía y bajaba de forma aleatoria. Bots, I.A. en forma de supuestos psicólogos que te preguntan tu opinión ¡tened cuidado con esto! ¿Cuánta gente había de verdad detrás de los perfiles? El remate fue cuando me ofrecieron comprar un lote de mil seguidores. Creo que no digo nada nuevo, que todo el mundo lo sabe. ¡Es tanta la mentira que se vierte en esta red social!

Así que después de ver como el móvil consumía batería estando apagado, los avisos del aparato diciéndome que se estaban consumiendo no sé cuántos megabytes sin estar utilizándolo, la sospecha de estar siendo espiada a través del micrófono, dije ¡se acabó! Sí, ya sé, había que dar a la opción de salir pero no me acordaba de la contraseña para volver a entrar. Por pura vaguería no buscaba otra.

Pensé en los lamas del Tibet que crean con arenas de colores mándalas de extraordinaria belleza para luego deshacerlos y así ser conscientes de lo transitorio de la vida, de la consciencia del momento mientras se realiza un bonito trabajo. No se hacen dependientes de nada. Observan, absorben la belleza y la dejan ir.

Me enamoré de mi galería, de lo que en ella expuse, de las cosas que vi y las que leí, y como un lama tibetano, me desenganché de todo aquello, lo borré y lo dejé ir.

 

Que sepáis, que lo que se sube a las redes, en las redes se queda, nada se borra, repito, nada.  Por lo menos he conseguido que el móvil no consuma tanta batería ni megabytes.

 

IOLANTHUS 

*Me di cuenta más tarde que sí recibía visitas al blog. Así que he vuelto con otra cuenta, pero las normas las pongo yo. 

Vanitas vanitatum et omnia vanitas. 


sábado, 31 de octubre de 2020

NOCHE DE DIFUNTOS

                                             



IN PARADISUM

 

La queremos alejar de nosotros, pero ella siempre está y estará ahí, esperándonos mientras haya vida. No nombrarla no significa que no exista. Ignorarla puede ser un alivio durante un tiempo. A tiempo, su tiempo, un tiempo que no  existe, que no se cuenta.

Al otro lado hay un lugar de dimensiones abstractas, unos dicen que hay luz cuando han regresado de un coma, otros en cambio han quedado atemorizados tras su vuelta.

Yo un día soñé que estaba muerta, o sigo muerta y no he despertado. Ya sé que es un poco ripioso esto que digo, pero lo soñé. Lo cierto es que no tuve miedo. Era un lugar totalmente oscuro. Veía  mi cuerpo tendido en una especie de mesa de acero, como la mesa donde se hacen las autopsias. Estaba con los brazos sobre el pecho, el cabello largo me cubría el rostro. Era yo, quieta y gris. Anduve unos instantes por la oscuridad, y pude constatar que no había nada. No oía nada, tan solo  me acompañaba un pesado sentimiento de tristeza. Quise acabar con aquello, con la secreta necesidad de morir.

Callé las falsas esperanzas, mudé los deseos incautos, perfilé los contornos de aquella oscuridad que llevaba conmigo. Supe que no podría jamás desprenderme de los recuerdos dolorosos y entonces los amé porque ellos eran parte de mí. Decidí, de una forma un tanto borrosa que no seguiría mintiéndome creando una imagen equivocada del amor. Fui cayendo en la cuenta de que sólo era un cuerpo habitado por un alma que me dictaba estas palabras, que no son mías. Bajé al pozo de la desesperación pidiendo clemencia y allí no encontré nada, sólo dolor e insatisfacción. Cuando tocaba fondo, ese fondo oscuro donde el tiempo no contaba, donde las dimensiones se escapaban a la percepción, quise volver a mi cuerpo.

Volví de aquella supuesta muerte algo más ligera. No vi luces, sólo el sol de la mañana que me recordaba que estaba viva y que había muchas cosas por hacer, por experimentar. Lo cierto es que no me pesa nada el cuerpo, mis pensamientos son como un bálsamo de felicidad.

Ya no miro por la ventana pues el cielo es inmenso y de vez en cuando escucho un coro de ángeles que me recuerda In Paradisum de Gabriel Fauré.



                                            https://www.youtube.com/watch?v=6-i1ESIRKdA

sábado, 24 de octubre de 2020

POLIFEMO ENAMORADO

 


Hacía tiempo que Amaltea* no paseaba por el jardín de los cíclopes, el que está rodeado de mar, excepto por un pequeño istmo, que en ciertas épocas del año se inunda y no se puede transitar. Pisaba con cuidado entre distintas imágenes en flor, con temor a ser descubierta. Encontró entre la maleza un papiro que olía a jazmín y que contenía  un poema de amor escrito en la Koiné. Enseguida despertó en ella una añoranza. Se conmovió hasta las entrañas porque, por primera vez, el amante no se ocultaba tras unas metáforas confusas, difíciles de entender. No pudo, en toda la tarde, por más que lo intentó dejar de pensar en aquellas dulces palabras desnudas, que a su vez desnudaban su alma de náyade. El vello se le erizaba mientras veía con cierta curiosidad como los moluscos pegados a la roca de la playa soltaban una espuma blanca y burbujeante que resbalaba por el saliente de la roca. Algo se había transfigurado en el jardín de los cíclopes. Ella, que no quería volver al lugar para no provocar furias que no se apagasen, para no regar con lágrimas de locura  un oasis imposible, de nuevo había traspasado la frontera y se había dejado acariciar la piel por el viento y le provocaba pensamientos prohibidos que sólo se pronuncian en secreto.

No supo si fue Polifemo quién dejó allí ese papiro. No sabía si volvería de nuevo a colarse en el jardín a través del istmo. Las cosas cambian, las semillas germinan y crecen, lo inefable también.

 El cíclope se pasaba las horas observando desde su atalaya a los que se colaban en el jardín. Cuidaba de sus cabras en paz, hasta que la vio a ella. Tiempo después, tierno y amable, como ninguna mitología haya descrito, a algunos les regalaba corazones y a otras besos. Apenas se enfadaba y no ponía veneno en su voz.

Polifemo, el de las muchas palabras, espera el regreso de los paseantes y el de la náyade. En el s.XXI han cambiado mucho las cosas. Amaltea no sabe cuándo volverá al jardín de imágenes floridas. Dejó, no obstante,  un ósculo de despedida en el aire.

Más vale que Polifemo no tenga esperanza de ver a Amaltea, pues todavía tendrá que seguir amamantando a Zeus en Creta. Ya sabemos cómo son los dioses, para ellos no existe el tiempo.

 

*Amaltea, es en la mitología griega la nodriza de Zeus. A veces se la representa como la cabra que amamantó al dios en una cueva de Creta. Otras veces se la representa como una náyade, hija de Hemonio, que crio al niño con la leche de una cabra en el monte Ida.


IOLANTHUS



sábado, 10 de octubre de 2020

COMUNIDAD TOMADA

 

Hay días que tengo la sensación de estar viviendo dentro de un cuento de Cortázar, Casa tomada, en una versión diferente.

En el cuento, no se sabe quién se apodera de la casa pero en la realidad de hoy sí. Mientras vivimos nuestras vidas anodinas, como la del narrador y su hermana Irene, el Gobierno de la Comunidad va “tomando la ciudad”. Primero por municipios, luego las poblaciones del extrarradio. Al pronto, casi no nos molestan estas medidas pues podemos seguir con nuestras monotonías, miedos y amenazas de los discursos políticos que se amparan en la salud y el bienestar del ciudadano. Irene y su hermano, se fueron a otro lado de la casa. Lo que había tras la puerta no era muy necesario, podrían vivir sin ello.

El “polvo” que circula por nuestra ciudad, no es como el del cuento. Este “polvo” es una amenaza  pues se introduce en los lugares cerrados, se respira, es transportado en el cuerpo de las personas y se propaga tras un estornudo, una tos, un canto, un beso, un abrazo. Seguimos impávidos, impotentes, leyendo periódicos, tejiendo, cocinando, trabajando. En el momento de mayor tensión, el Estado se come a la Comunidad y dictamina que hay que restringir la movilidad para no transportar el “polvo” que puede llegar a matar. Antes se diseminaba en la vida nocturna, los jóvenes dispersaban el “polvo”. Luego los restaurantes, luego en los parques. Parece que no les quedó más remedio que abrir los colegios, con el riesgo de que los niños lleven el “polvo” en sus zapatos y contagien a sus familiares. Ahora el peligro está en las casas si se juntan muchos familiares. Todos llevamos el “polvo” que merma nuestras ilusiones pegado en el cuerpo. También lo llevamos en el transporte público pero las autoridades garantizan que casi no se producen contagios en este medio. Unas veces el “polvo” que está dotado de una inteligencia superior, infecta y mata. Otras en cambio ni lo notan.

En esta tesitura se pasan los días y la Comunidad recurre al TSJM y gana por veinticuatro horas al Estado. El Estado muy molesto recoge la pelota y declarando el Estado de alarma le marca un golazo a la Comunidad y la confina de nuevo. La casa ha sido tomada totalmente.

Irene y su hermano se marcharon de la vivienda y tiraron la llave en la alcantarilla para que nadie entrara estando la casa como estaba.

Nosotros en nuestras rutinarias y amenazadas vidas nos quedamos dentro y de alguna forma nos vemos empujados a abrir otras ventanas preparadas para la ocasión. Por esas ventanas no entra el “polvo” ni el aire limpio, pero sí unos lodos que matan la razón.

IOLANTHUS

Foto: Iolanthus. Catedral de Plasencia


domingo, 4 de octubre de 2020

LA DISYUNTIVA DE ESTHER

 Al grano: 

- Es difícil escoger en la vida ¿no crees Ariel? -Le preguntaba la bruja, Úrsula, a la Sirenita.

La Sirenita escogió y puso toda su pasión en ello y como ya se sabe la cosa acabó bien. Es un cuento.

La disyuntiva de Esther es otro tema. De pequeña la llamaban "Dudi", porque dudaba siempre que tenía que escoger una cosa y excluir otra. Generalmente no se equivocaba, pero hasta que llegaba la hora de tomar una decisión, las dudas, los miedos y los más rocambolescos pensamientos se apoderaban de ella. El miedo la paralizaba pero también la protegía.

Ya cuando tuvo edad para independizarse pensó que lo mejor sería vivir en un pueblo. Se equivocó, pues ella era urbanita. Tardó lo suyo en volver a la ciudad. Cuando visitaba un museo, no quería perder ningún dato y de tanta técnica que veía se perdía el arte. Todo le parecía dulzor cuando llegaba la fruta de verano y tardaba una eternidad en saber cuál se iba a comer. Ante la duda, todo a la boca. Si estaba en la montaña, la cual adoraba, también necesitaba el mar.

Un día visitó a una echadora de cartas de Tarot y lo que le dijo es que tenía un problema de enamoramiento.

-Mal de amores, querida.

-¡Cómo!

-Sí, eso es.

A continuación nombró a un tal Plotino y su escrito sobre la belleza y el amor. Recibió una soberana charla sobre el tema, que aquí no voy a reproducir entera. 

Resumiendo:

-Tienes que concentrar tu atención en el momento presente. En la dispersión no hay disfrute, hay un hedonismo, un querer gozar de todo como si la vida se acabase pronto. Es así como no se disfruta de nada. Si la ciudad te agobia, recuerda que es donde has querido estar. Si visitas un pueblo disfruta de las horas que pases en él, pues en breve volverás a la ciudad. No quieras llevarte todas las frutas a la boca y formar una mala macedonia porque mezclarás todos sus sabores en el paladar y ninguna dejará huella. Si vas a un Museo de arte, desgrana el contenido de pocos cuadros, ya volverás otro día a contemplar lo que te falte. Si te enamora la montaña, siente su fuerza en ti y lo que te ofrece. El mar queda lejos de aquí y aunque te enamore y quieras estar también allí, piensa que todo tiene su momento y a veces, por doloroso que sea, hay que sacrificar un bien querido a cambio de un poco de serenidad psíquica.

Pero Esther recordaba a la Sirenita, el cuento de su infancia, y de toda aquella charla apenas vislumbró una sola verdad. 

Ayer, me preguntó por teléfono qué debía hacer, si seguir los consejos de la vidente, o pasar de ella. Ambas opciones la preocupaban y dudaba. 


IOLANTHUS







sábado, 26 de septiembre de 2020

NO TENGO RESPUESTAS

No tengo respuestas a los grandes interrogantes.

No pienso en el futuro pues es imperfecto y constantemente está sucediendo, nada puede pararle. No le busco cinco pies a la paloma bastante tiene con los hilos que la atrapan y la dejan manca.

Me quedo en el instante, éste que ya ha pasado y no deja de pasar y pasa por mi mente en estado de júbilo, porque me siento capaz de respirar.

A todas luces no me gustan las sentencias que caen como plomos y que todo el mundo cree que se puede autoaplicar. Hay demasiados gurús en esta vida que se creen poseedores de la ciencia de la espiritualidad. Acaso saben que cualquiera puede ser su propio maestro si se sabe bien donde mirar. Pero es mejor que una autoridad tome el mando del alma de todos, así se sienten más poderosos que los demás. Un ciego conduce a otros ciegos tan ciegos como yo, como tú, como él, como aquellos y los de más allá.

No tengo respuestas. Quizá es que no están bien formuladas las cuestiones o las sentencias no dan en la diana. O quizá... ¿Para qué tanta pregunta? No necesito preguntas me basta con ser y estar.

                      IOLANTHUS 



miércoles, 9 de septiembre de 2020

HUMOR Y VIDEOJUEGOS

 ¡Cómo cambian los temas que nos hacen reír! Esos temas se transforman en nuestro cerebro en el transcurrir de la infancia a la madurez.

A veces se descubren situaciones curiosas. Quién creció leyendo tebeos de Mortadelo hoy desarrolla su modelo humorístico según esa influencia. Se ríe de gente que sale volando por una explosión, torpezas de todo tipo o malentendidos. Sin embargo con el transcurrir de los años y las formas de entretenimiento, los más jóvenes que se criaron con videojuegos como el Vice City, se ríen imaginando atropellos en masa de personas indeseables.

Según la R.A.E, humor/-ismo: es un modo de presentar, enjuiciar o comentar el lado cómico, risueño o ridículo de las cosas.

¿Con qué bromean los jóvenes de hoy? Con algo que hace cuarenta años hubiera sido una barbaridad. No existían esos modelos, de acuerdo. Que conste que salvo alguna enfermedad psiquiátrica, estos videojuegos no fabrican asesinos en potencia. Pero ¿Qué ocurre cuando se trivializa la violencia?

Videojuegos que te ponen una o varias armas en las manos para "eliminar" lo que impide llegar a la meta aunque la meta sea una gilipollez  intrascendente.

En el videojuego todo es posible, aunque con sus dificultades, claro. Aquí ya me pongo pesada, lo sé. 

Los que leían a Mortadelo, Zipi y Zape, héroes de comics etc. tenían que ir a misa los domingos ( por obligación, no por devoción) cuidar de hermanos más pequeños, hacer los recados a mamá, ir al cole donde estudiar o no era lo de menos. Los padres eran excesivamente autoritarios. Se pasaban con los golpes y castigos ¿Descargaban sus frustraciones con las criaturas?

Los millennials que han crecidos con los videojuegos no iban a misa los domingos (no ha pasado nada), jugaban, si podían,  con los más pequeños, porque o no tenian tiempo o no había hermanitos pequeños. No hacían los recados a mamá porque mamá ( tenía que ser Superwoman) ya se había encargado de que no faltara nada. Iban al cole a estudiar sí o sí para no ser fracasados sociales. Los padres intentaron ser tan comprensivos que algunos fueron demasiado permisivos. Bastantes de ellos jamás han ejercido la carrera que estudiaron.

Sé que hay que matizar muchas cosas dichas anteriormente, pero así, a groso modo, la violencia implícita en los dibujos de la Warner o los tebeos no te convertía en el creador de tu propia batalla. Sin embargo ahora y me pongo en el 2020, me pregunto si no se les estará engordando el ego a nuestras criaturas haciéndoles creer que son los nuevos amos del mundo, porque portan  sus avatares armas especiales y la gloriosa sensación de saberse mejor guerreador  o guerreadora que nadie.

El problema es que hay muchos "nadies" con la misma actitud individualista. No sabemos si sabrán  encontrar el lado ridículo de los avatares y reírse de ellos y con ellos.


¡Que la fuerza te acompañe!


© Iolanthus


Foto: Victoria_Borodinova.




domingo, 30 de agosto de 2020

DECIR ADIÓS

Tienes que decir adiós.

Necesitas decir adiós.

Debes desprenderte  de las canciones profanas

De los cantos de sirena, de lo cantos rodados

De la mujer extraña que te complica

De la frase buscada que te habita

Debes decir adiós

 A la imaginación que la ensalza

A sus virtudes prestadas

Tienes que  ignorar todas sus batallas

Porque si no lo haces, sufrirás,

cuando tu ser no la alcance

Cuando tus incendios quemen tus ansias

No mereces enjaularte entre sus telas doradas

Necesitas mucho más que unos versos de madrugada

Que un pensamiento vivo que arañe tus entrañas

Tienes que olvidarla

Para ser libre de ese enredo que no acaba.

Es un vampiro que succiona de tu esperanza

Ya no esperes más, así podrás equilibrar la balanza.

Tienes que decir adiós

Soltar... Soltar...soltar...

Decir adiós, con la mirada.

Soltar...

Adiós,  di adiós.


©IOLANTHUS






domingo, 23 de agosto de 2020

¿QUIÉN MUEVE LOS HILOS?

       Siempre ha habido revoluciones, cambios, sistemas políticos ensalzados y después derrocados. Enfermedades, guerras, dictaduras, democracias, populismos, tiranías. Me pregunto a qué nos estaremos enfrentando ahora. Hay tantas teorías poco halagüeñas sobre el futuro que nos espera. 

      Sí, hoy me levanté pensativa. Soñé que le gritaba a una mujer de mediana edad. La cogía del cuello con rabia y le decía ¡Yo hago lo que me sale del coño! ¡Usted no sabe de lo que es capaz una mujer con dos cojones! y acto seguido me reía a carcajadas mientras la mujer mostraba un gesto de perplejidad. Y todo porque quería obligarme a ponerme la mascarilla cuando ella tampoco la llevaba. En el sueño las dos estábamos equivocadas. 

      Volviendo al pasado muy de pasada. Cuando  echamos la vista  en la Historia los grandes cambios se desarrollan en apenas cinco páginas de un libro. Ejemplo, teocracias, imperios, feudalismo, reyes que dependían de los papas para reconocerse como tales, absolutismo, burguesía, políticos, Estados, mercados, grandes corporaciones. 

      El poder va cambiando de nombre, de manos, de mentes y...seguimos igual de mal. En las crisis los que pierden siempre son los más desfavorecidos. Se pierden derechos, se explota a las personas. Se compran vidas, voluntades, voces supuestamente libres etc. Los cambios llevan tiempo, hay cambios dentro de esos cambios y nada es seguro. 

     ¿Nos pondrán un vacuna con nanotecnología para controlarnos? ¿Diezmarán a las mujeres con capacidad reproductiva? ¿Se encargará el virus de mermar la población?¿ Aumentarán el uso de las tecnologías hasta el punto de que se pierdan puestos de trabajo físicos? ¿Comprarán las grandes corporaciones a los países más endeudados? ¿Nos esclavizarán más de lo que ya lo hacen? ¿Nos daremos cuenta?

      Ya no somos personas, somos tornillos que se reemplazan por otros tornillos con el pensamiento más afín a los que mueven los hilos. ¿Quién mueve los hilos? ¿Quién tiene el poder de hacerlos mover?

      Y mientras tanto se suceden los cambios, reconozcamos lo inmutable que hay en nosotros. Esa mente capaz de crear, de tomar distancia, de flexibilizarse, de introspección, de observación etc.

¡Que la fuerza os acompañe!

                       IOLANTHUS

                       INFIERNO. TRÍPTICO EL JARDÍN DE LAS DELICIAS. EL BOSCO.

sábado, 8 de agosto de 2020

QUIEN SABE DE SILENCIOS

La poeta siempre necesita un lector que la escuche
¿Siempre?
No, no siempre.
A veces se quedan los versos inmersos en su corazón.
Moran allí proporcionándole vida y salud poética.
No todos los estados del ser se describen con palabras.
No hay gramática para tales momentos
ni expresiones cabales que los eternicen.

A veces la poeta calla.
Su mudez no es olvido del mundo
sino olvido de si  misma
                                            mente expansiva que va más allá del verbo.


Quien sabe de silencios 
                                           no amenaza, 
                                                                  no profetiza arrepentimientos

ni vueltas alrededor de un mismo tema.
No hunde al vate en el anatema.

Quien sabe de silencios, comparte, calla y paciente espera.


                                      © Iolanthus




viernes, 12 de junio de 2020

EL HARTAZGO



El Hartazgo es un síntoma emocional suficiente para desencadenar el final de un tránsito indefinido y en consecuencia el comienzo de otro destino.


El Hartazgo te hará degustar otros manjares prohibidos pues el que te gustaba ha perdido sabor.

Desanda todo lo recorrido.
Descubre día a día que lo pasado fue un extraño sueño vivido.
Piensa que te quedaste dormido y que ya amanece un horizonte distinto.

Hace tiempo que tus manos se cerraron en un puño amenazando el aire que susurraba palabras en contra de tus sentidos.

Sí, es bueno que te hartes, que rompas, que rasgues, y dejes de perder tu valioso tiempo en una quimera que se esfuma apenas la piensas.
Ya no hay Beatriz para Dante, ni Laura para Petrarca.
Porque ellas son una entelequia, son de todos y de nadie.

Ave César, que el Hartazgo te sea propicio y te sane.

©Iolanthus



domingo, 10 de mayo de 2020

LOS LEONES



Los leones, cuando caen heridos, o de viejos, piden clemencia a la manada y ésta, que entiende que ya cumplió con su papel de rey cuando fue dueño de todo, territorio, progenie y leonas, le ningunean, o le vencen en combate. Si queda malherido se aleja del grupo y posiblemente muere y es devorado por otras alimañas. Si perdió su fuerza morirá porque las leonas no cazarán más para él.
 Las personas nos apiadamos de la vejez, con toda su debilidad y dignidad. Pero cuando una persona en el clímax de su juventud, fue un tirano que nunca amó ni a su pareja ni a su progenie, la disposición de ánimo es otra. Las leonas, aún en la debilidad y vejez del tirano, siguen ocupándose de él, por caridad, pero no por amor filial.
Los leones son más dignos.

Mamífero, Gato, León, Mundo Animal, Retrato, Carnívoros

martes, 28 de abril de 2020

LA BÚSQUEDA

     

BASÍLICA DE SAN PEDRO, VATICANO
FOTO: IOLANTHUS


                                      https://www.youtube.com/watch?v=9S43CKjIGVg
                               Laudate Dominum de Mozart Barbara Hendricks



       La religión en la que la educaron se parecía a una casa llena de habitaciones separadas entre sí, por multitud de laberintos. Hasta la fecha, no nos ha informado de que haya encontrado la habitación más iluminada de la casa. En ella encontraría la llave para quitarse de encima las cadenas del ego.

        Encontró estancias en las que la hipocresía se disimulaba con distintos rangos. Suntuosidad, mentiras, manipulación, ansia de poder etc. Dio muchos rodeos. Cuando parecía que llegaba a lugar seguro en realidad se estaba perdiendo. Laberintos, autojustificaciones, componendas, para seguir buscando y continuar indemne, cosa que es imposible. Encontró pasillos cegados, ventanas que daban hacia el abismo y volvía una y otra vez a los símbolos en los que la criaron. Hasta que llegó un momento en el que perdieron su autenticidad, su valor,  su primera eficacia.
        A medida que pasaba de estancia, unas veces estaban abajo, otras estaban arriba, los símbolos se deshicieron para transformarse en otra cosa. En algo que salía más de su corazón que de la casa.
Ella sólo quería encontrar una sencilla sala, de paredes desnudas que está iluminada por una luz divina que consuela y fortifica ante los dolores del mundo.
        Pero ahí sigue buscando entre pasillos, escaleras y salas. Su limitado ser se consuela pensando que el proyecto se inició en el alma y no abandonará la búsqueda. Algún día lo encontrará. Quizá cuando limpie los escombros de un conocimiento equivocado.

Laudate Dominum.


                                        IOLANTHUS



BASÍLICA  DE SAN PEDRO VATICANO
FOTO: IOLANTHUS


miércoles, 8 de abril de 2020

EL REY PESCADOR

Tú que comprendes la vida...
Has estado en su dulzura, arañándote con su amargura y ya sabes que nada cambia.
Que el pasado sigue siendo presente, que mutan las formas pero no los contenidos.

Sabes de cabalgaduras aunque...ya no hay caballeros.
Sabes de horas duras...aún llenas de anhelos.

Comenzaste siendo peón de ajedrez y hoy eres el rey indiscutible para corazones desamparados.
En un tiempo por llegar, te convertirán en un dios.

Tu conocimiento es fruto de querer ayudar, hacer el bien. pero el bien no camina solitario,
siempre lo acompaña su oponente. Inherentes, inconscientes, inapelables, bienes y males.

Porque no nacemos solos, nos estallan las cadenas en el alma.
No, no podemos hacer nada para evitar desangrarnos.
Existe una verdadera libertad, difícil de alcanzar sin que su onda expansiva no dañe a otros.

Sí, sabes, sabes demasiado y a veces tanta verdad duele tanto...
Pero a través de tus ojos y al sentido de tu tacto se le desprende amor de enamorado.
Néctar de pasión, de lo que eres, de agua para sed, de calma para inquietud.
Guardián de secretos de mortales infelices, poeta de versos no escritos y en el corazón escuchados.
Enderezador de caminos que se tuercen por desconocimiento, por falta de credo interior.

Sí, sientes...siente profundamente, tanto que los valles quedan anegados con tu llanto
erosionando tu tierra de soberano.
Hasta los reyes necesitan lacayos, para soledades no buscadas y descargar sus secretos.

Los profundos arcanos piden ser compartidos como si tuvieran vida propia.
Al pronunciarse salen impelidos hacia otra alma,  Diotima  sabia.
No son un simple sueño que se evapora en las venas, su energía fluye haciéndose realidad.
Este pozo de sabiduría se llena y se ilumina hasta cegar a los aprendices de vivencias.

Confesiones gritando en un interior cansado. Escenas en tres actos que quieren seguir existiendo
antes de caer en el olvido.
Y por estos acentos de amor,
tú comprendes bien la vida
porque has compartido su dulzura, te has clavado espinas de rosas amargas
y sabes...que pocas cosas cambian.


                                                         IOLANTHUS



Lancelot du Lac, MS M.805 fol. 104r - Images from Medieval and ...
Lancelot du Lac, Northeastern France, perhaps in Saint-Quentin or Laon, between 1310 and 1315

miércoles, 1 de abril de 2020

CRIATURAS INACABADAS

   Te has quedado triste. Lo sé porque recoges tu cara de forma cansada y ya no le prestas interés a lo que estabas haciendo.
Quizá sea mejor no decir nada sobre la enfermedad de mis ojos hasta que ya sea patente y no lo pueda disimular. O cuando sienta miedo de salir a la calle por no tropezar. 
    Te describo los síntomas de la forma más suave que puedo:
Que no puedo leer durante mucho rato, que no puedo escribir al ordenador más de una hora pues las letras se doblan. Las líneas se curvan, los cuadros se plegan en pequeñas muescas que destrozan el conjunto. Pero eso no es nada. Aún puedo leer y aún puedo escribir. Tengo la esperanza en que la enfermedad degenerativa se pare sola o se retrase.

    No sé lo que haré cuando se me ocurra un poema y no pueda escribirlo. Tal vez tú, seas mis ojos y mis sentidos. Yo te dicto las palabras y tú escribes sin rechistar. No me harás preguntas sobre la naturaleza del contenido, porque la ambigüedad será su riqueza, pues en ella caben todas las posibilidades y no solamente una. Serán los poemas campos abiertos donde jamás habite la tempestad, y quizá entenderás que en cada verso hay una brizna del verbo amar. 
   No sé si eso será posible porque entre el poema que danza en la cabeza y la mano que lo escribe hay un lazo que no se puede cortar, una intimidad que no se puede profanar. Quizá sea el tiempo en el que entiendas, cuando hable en voz alta, lo indispensable que es para mí fabular, hablar de "el rayo que no cesa "y poner en mi voz callada un reflejo de nuestra existencia.
    Es la naturaleza pura contradicción, me dio la luz para crear un mundo de criaturas inacabadas, y me oscurece la forma de transcribirla. Pero aún no. Lo cierto es que podrán quedarse ciegos mis ojos, pero no mi corazón


                                           IOLANTHUS


Claude Debussy - Arabesque No. 1
https://www.youtube.com/watch?v=Ogx9LgSH-z4



CANTIGA DE AMIGO

Véngome de estudiar las nubes,
su volumen, color, altura, esponjosidad,
humedad, y capacidad de crear paleidolias.

Allí mismo lo he visto, he visto tu rostro que fruncía el ceño
como un juez desconcertado.
Tus ojazos marrones mirábanme confusos
y tus labios, dirigiendo la música de tu alma
escapábanseles besos de alarma.

Dirigíanse las nubes hacia el norte y los besos hacía el sur.
Cargadas éstas de lluvia  deshacíanse en el mar de tu cuerpo.
 Toda suerte de locuras empapaban tu vigorosa figura
Y cuando en tus poros mezclábanse la sal y la sed
las nubes se despejaron dejando un claro sobre tus pestañas.
Y entonces pude saber que las aguas  représanse por amor y  descárganse con ansia
con suave tacto y un poco de fe.

Vengo de ver el cielo.
Declarábase cómplice y mensajero de los secretos del corazón
y los abrazos de los amantes.

©Iolanthus

Foto:© Iolanthus

sábado, 21 de marzo de 2020

DOY GRACIAS A LA VIDA

      Hoy sigo con este blog que abrí hace unos años pensando que tendría muchos lectores. Los tuve cuando funcionaba Google +, pero hasta esa opción ya la he perdido. Sin embargo a pesar de todo lo difícil que es mantener la atención del lector, que cada vez es más exigente y busca sensaciones intensas o calidad en lo que se escribe, voy a continuarlo porque, querido o posible lector, lectora, no sé hacer otra cosa. Pero basta de lamentos. Especialmente ahora con lo que estamos viviendo.

     No quería hablar de ello pero es inevitable, el Covid-19 se apodera de todo. Mata e infecta. No hay que olvidar que hay gente que lo supera. Yo me pregunto si dadas las circunstancias debería prepararme para morir.

Hoy finalicé la novela de Dostoievski, Crimen y castigo. Me ha sorprendido encontrar este sueño que nos describe el autor en la mente de Raskólnikov:

   ....Soñó en su enfermedad que el mundo todo estaba condenado a ser víctima de una terrible, inaudita y nunca vista plaga que, procedente de las profundidades de Asia, caería sobre Europa. Todos tendrían que perecer, excepto unos cuantos, muy pocos, escogidos. Había surgido una nueva triquina, ser microscópico que se introducía en el cuerpo de las personas. Pero estos parásitos eran espíritus dotados de inteligencia y voluntad. Las personas que lo cogían se volvían inmediatamente locas. Pero nunca, nunca se consideraron los hombres tan inteligentes e inquebrantables en la verdad como se consideraban estos atacados. Jamás se consideraron más infalibles en sus dogmas, en us conclusiones científicas, en sus convicciones y creencias morales. Aldeas enteras, ciudades y pueblos se contagiaron y enloquecieron...

     Espero que aparte de la neumonía que causa el Covid-19, no nos volvamos todos locos.
En mi entorno, hay miedo pero también hay mucha ternura y cariño. La gente sale al balcón todos los días a las 8h para aplaudir a todas las personas que cuidan de la salud y a las fuerzas del Estado que hacen lo que es su deber.
     No hay que perder la esperanza. Quedaremos muy mermados a todos los niveles, psicológicos, económicos, físicos. Una carrera hay en los laboratorios de todo el mundo para encontrar una vacuna.
Hasta que llegue esa salvación, no perdamos la cabeza. Ya de nada sirve acusar  a nadie de no haber sabido gestionar la situación. Yo creo que en el fondo, nadie tiene ni idea de lo que es este bicho y lo que representa. Algunos tendremos suerte y otros no.

Si tuviera que escribir mi propio epitafio diría:
Doy gracias a la vida por haber vivido, a pesar de todas las heridas sufridas en el alma y todos los dolores de mi cuerpo. Por todo lo que me ha dado, mi marido, mis hijas. Por todas aquellas personas que se cruzaron en el camino y me aportaron tanto, bueno y malo. Lloré, fui feliz, me enamoré (este es un estado crónico en mí) Gracias, mereció la pena estar aquí.


                                                                       IO_LANTHUS